Como recordatorio de los buenos tiempos y en honor al fundador de la cervecería, Johann Liebhard es esta nostálgica cerveza especial con la que puede contar con seguridad en las variedades tradicionales de textos bávaros antiguos elaboradas. La peculiaridad de la cava de cerveza es la fina turbidez de la levadura y el agradable amargor. Dado que se embotella sin filtrar, se conservan muchas proteínas naturales, levaduras y componentes del lúpulo. Así conserva su carácter original, y el conocedor de la cerveza determinará qué plenitud de sabor, esta cerveza muy bebible. Además, la levadura rica en vitaminas y minerales hace, desde el punto de vista nutricional, una contribución a la salud que no debe despreciarse. Brumoso dorado pálido. Aroma a malta de pan. De cuerpo ligero con una sensación en boca maravillosamente suave. La excelente malta con notas de mantequilla se acompaña de lúpulos herbáceos. Bien equilibrado, muy bebible y muy bueno.